LIBROS, ARTÍCULOS Y CONFERENCIAS ASOCIACIÓN EUROPEA DE HISTORIA DEL PSICOANÁLISIS
PRESENTACIÓN MESA REDONDA A.E.H.P: TEORÍA Y TÉCNICA DEL NARCISISMO, SU EVOLUCIÓN HISTÓRICA Y EL DEBATE ACTUAL.
Roberto M. Goldstein
Barcelona
Febrero de 2004
En nuestra mesa redonda anterior debatimos acerca de lo Prohibido, lo prohibido que es lo potencialmente realizable, como el incesto y el parricidio. Hoy ponemos a debate distintas visiones sobre lo imposible, donde podemos agrupar:
1º el fracaso de la ilusión de poder controlar los pensamientos y acciones del otro
2º el descubrir que tenemos que escoger entre un sexo u otro y,
3º el envejecimiento y la muerte.
(Joyce McDougall, 1987)
Constatamos con dolor que no somos omnipotentes, ni bisexuales, ni
eternamente jóvenes, ni inmortales.
Aunque suene a redundancia, aclaro que en el Edipo está la prohibición y en el
narcisismo, el interjuego omnipotencia-impotencia.
Hoy debatiremos sobre el narcisismo, desde tres enfoques diferentes en esta
mesa, amén de los que surjan en la discusión con los asistentes a la misma.
El concepto de narcisismo fue empleado por primera vez en 1887 por el
psicólogo francés Alfred Bidet (1857-1911), para designar una forma de fetichismo que
consiste en tomar a la propia persona como objeto sexual, citando a Elizabeth
Roudinesco y Michel Plon . (Diccionario de Psicoanálisis, 1998)
Según los mismos autores en 1908, Isidor Sadger habló de narcisismo a propósito del
amor a sí mismo como modalidad de elección de objeto en los homosexuales,
diferenciándose de Havelock Ellis que consideraba al narcisismo como una
perversión, Sadger lo consideraba un estado normal de la evolución psicosexual en el
ser humano.
Aunque ya también en la tradición griega, se llamaba narcisismo, al amor a sí mismo.
La leyenda de Narciso se hace conocer gracias al tercer libro de la Metamorfosis de
Ovidio.
Narciso se atrajo el amor de más de una ninfa, entre ellas Eco a la que rechazó,
ésta languideció hasta quedar reducida a la voz. Los dioses castigaron a Narciso
haciendo que, extasiado ante su propia imagen reflejada en un lago, se consumiese de
amor por sí mismo. Otra versión dice que muere ahogado al querer abrazar su imagen.
Fue transformado en la flor de su nombre, que personifica la muerte prematura.
En la obra de Freud, el término Narcisismo aparece por primera vez en una
nota añadida a los Tres ensayos sobre una teoría sexual, donde Freud hablando sobre los
invertidos, no utilizando la palabra homosexual, dice que ellos se toman a sí mismos
como objetos sexuales y que partiendo del narcisismo, buscan a hombres semejantes a
su propia persona, a quienes amar, como sus madres los amaron a ellos mismos.
En 1910, en Un recuerdo infantil de Leonardo Da Vinci, y en El caso
Schreber, consideraba al narcisismo como un estado normal de la evolución sexual.
En 1914, en Introducción del Narcisismo, el término adquiere el valor de
concepto técnico y toma un lugar esencial en la teoría del desarrollo sexual del ser
humano. Freud elabora este texto basándose en sus estudios sobre las psicosis, y en el
trabajo de Karl Abraham, Las diferencias psicosexuales entre la histeria y la demencia
precoz de 1908 donde, aunque sin utilizar la palabra narcisismo describía el proceso
de desinvestidura del objeto y repliegue de la libido en el sujeto.
Introducción del narcisismo es un artículo perturbador, como dice Ernest Jones, ya que
le aplica una desagradable sacudida a la teoría de las pulsiones con las que el
psicoanálisis había trabajado hasta entonces.
Freud crea una nueva dualidad pulsional pulsiones del yo-pulsiones de objeto.
A partir de 1914, el psicoanalista debe trabajar de otra manera. Este fue un paso
importante en el tratamiento de las psicosis y otras patologías que hasta entonces se
consideraban intratables por el psicoanálisis.
Llegamos así a 1930, en El malestar en la cultura, Freud dice:
originariamente, el Yo lo contiene todo; más tarde, segrega de sí un mundo exterior,
dando otra vuelta de tuerca a la teoría.
En estos 16 años, del 14 al 30, no solo Freud va aportando nuevas hipótesis
sobre el concepto de narcisismo, sino también sus discípulos, de los que sólo nombraré
a Lou Andreas Salomé, a quien no se le ha reconocido con justicia sus aportes.
Según André Green, siguiendo las huellas del destino del narcisismo después de
Freud, los analistas se dividieron en dos campos en relación a la autonomía del
narcisismo. Destacando en un campo los aportes de Bela Grumberger, para quien el
narcisismo es una instancia psíquica a igual título de las instancias freudianas de la
Segunda tópica, y en otro a Heinz Kohut, para quien el narcisismo es un equivalente
a la pulsión de muerte freudiana, es una enfermedad, una patología, y conduce a la furia
de destrucción del otro, la cual no es más que la contrapartida del miedo que tiene el self
a ser víctima de su propia aniquilación.
Por ultimo citaré a Mélanie Klein quien al postular la existencia primera de las
relaciones objetales, se vio llevada a rechazar la idea de narcisismo primario así como
del estadio narcisista; ella sólo habló de estados narcisistas vinculados a la retracción de
la libido sobre objetos interiorizados.
Desearía explayarme más sobre lo que he dicho, pero mi función de introductor
y moderador de esta mesa redonda, me obliga a presentar el tema y a quienes serán los
integrantes de la misma.
BIBLIOGRAFÍA.
Abraham Karl: «Les différences psychosexuelles entre lhystérie et la démence
précoce» (1908) OEuvres complètes, tomo 1, 1907-1914, París, Payot, 1965.
Freud Sigmund : «Un recuerdo infantil de Leonardo Da Vinci » (1910)
O.C. Vol. XI
Puntualizaciones sobre un caso de paranoia descrito
autobiográficamente (1911) O.C. Vol. XII
Introducción del Narcisismo (1914) Vol. XIV
El Malestar en la Cultura (1930) Vol. XXI
Amorrortu Editores. Buenos Aires 1984
Green André: Le Narcissisme primaire, structure ou état ? »,
LInconscient, 1966, I. ; « Un, Autre, Neutre : Valeurs narcissiques du même »,
Nouvelle Revue de Psychanalyse 1976
Grumberger Bela : « El narcisismo » Trieb. Buenos Aires 1979
Jones Ernest: Vida y obra de Sigmund Freud Editorial Nova. Buenos
Aires.1959
Klein Mélanie: Citado por E. Roudinesco y M. Plon en su Diccionario
de Psicoanálisis
Kohut Heinz: Le Soi Paris. P.U.F. 1991
McDougall Joyce : « Teatros de la Mente » Tecnipublicaciones. Madrid
1987
Roudinesco Elisabeth y Michel Plon: Diccionario de Psicoanálisis
Paidós. Buenos Aires. 1998
Salomé Lou Andreas: Lamour du Narcissisme Paris. Gallimard. 1980